El Bernabéu, la NFL y una tormenta de reproches
El Santiago Bernabéu vivió una jornada atípica el 16 de noviembre: más de 80.000 espectadores presenciaron el choque entre Miami Dolphins y Washington Commanders, después de que el estadio recibiera adaptaciones temporales cuyo coste superó los 2 millones de dólares. Fue una postal histórica, aunque sin el clásico mar de blanco en las gradas. Esa bienvenida sin reparos al fútbol americano encendió la ira de Javier Tebas, presidente de LaLiga, que acusó al Real Madrid de hipocresía por haber liderado la oposición al partido oficial que la competición había planeado en Miami.
Datos clave del evento en el Bernabéu
- Fecha: 16 de noviembre.
- Partido: Miami Dolphins vs Washington Commanders.
- Asistencia: más de 80.000 aficionados.
- Adaptaciones temporales: más de 2 millones de dólares invertidos para adecuar el estadio al fútbol americano.
- Ambiente: estadio lleno, pero sin predominio del blanco habitual del Real Madrid.
El choque previo: el partido de LaLiga en Miami que nunca fue
La polémica nace meses antes, cuando LaLiga proyectó llevar el Villarreal vs Barcelona al Hard Rock Stadium de Miami el 20 de diciembre, lo que habría sido el primer partido oficial de la competición en Estados Unidos. El Real Madrid reaccionó con una batería de quejas formales ante el Ministerio de Deportes y argumentó que trasladar un encuentro de la liga a otra país, a mitad de temporada, quebraría la equidad deportiva.
La crítica no quedó en despachos: jugadores como Thibaut Courtois y Frenkie de Jong expresaron objeciones desde la óptica del bienestar físico. La protesta se amplificó y contó con una acción simbólica en toda la competición: una silenciosa protesta coordinada de 15 segundos al inicio de cada partido en octubre, impulsada por la asociación de futbolistas AFE.
Cancelación y consecuencias
- El organizador del evento en Miami se retiró a finales de octubre, alegando «incertidumbre en España».
- Fue la segunda ocasión en que un intento de disputar un partido de LaLiga fuera de España quedó frustrado —un intento similar fue bloqueado en 2018.
- Barcelona y Villarreal mostraron su enfado por la suspensión; Tebas describió la cancelación como «una derrota para el futuro del fútbol español».
Tebas contra el Real Madrid: acusaciones de hipocresía y lucha por el control
En un extenso mensaje en X, Tebas cargó con dureza contra el club blanco por haber permitido ahora la llegada de la NFL al Bernabéu, cuando meses atrás lideró la cruzada contra el partido en Miami. «Llevamos semanas escuchando que hoy es ‘un día histórico para el deporte español’ porque la NFL está jugando en Madrid… Y lo más llamativo: el estadio pertenece al mismo club que lideró la cruzada de la ‘integridad’ contra el partido oficial de LaLiga en Miami… y que ahora lo cede gustosamente, previo pago por supuesto», escribió.
El presidente de LaLiga añadió ironía y reproche: «Entonces tenían a jugadores y aduladores repitiendo la misma narrativa, con idénticas expresiones de adulteración de la competición, enviaron cartas a todas las instituciones posibles, solo les faltó quejarse al Papa, mientras el Comisionado Europeo de Deportes ondeaba la bandera de la ‘tradición’ y la AFE llenaba sus bocas con ‘información’ y ‘transparencia’, cuando estaban perfectamente informados sobre cómo se iba a organizar el partido y que se respetarían los reglamentos.»
Más allá de la tradición: según Tebas, se trató de poder
Tebas no se conformó con censurar la actitud; trazó un diagnóstico político y estratégico: a su juicio, la oposición al partido de Miami no respondía a una defensa de la tradición o de la integridad competitiva, sino a intereses de control. «Hablábamos de 1 partido de los 380 que LaLiga juega durante toda la temporada», recordó, y aseguró que «está claro que en ese entonces ganó la intoxicación y la falta de visión de futuro. El problema no era la integridad, ni la tradición, ni la información: el problema era quién lo impulsaba.»
El presidente profundizó en las motivaciones que, según él, movieron la resistencia: algunos actores temen el crecimiento de LaLiga para facilitar el camino a sus mega competiciones, otros buscan sacar rédito económico y otros usan la cuestión para alimentar campañas políticas. Concluyó con una promesa: «Seguiremos intentando.»
Mientras tanto, el Barcelona busca alternativas
Frente al fracaso del proyecto en Miami, el Barcelona se mueve para aliviar las arcas. Según Mundo Deportivo, el club negocia un amistoso en Perú para finales de diciembre que podría dejar entre 7 y 8 millones de euros. Antes había rechazado una propuesta para jugar en Libia —que habría reportado unos 5 millones de euros— por motivos de seguridad.
Con la opción libia descartada y el plan de Miami colapsado, el partido en Perú aparece como la fórmula más atractiva para recuperar ingresos y cerrar el año con un respiro financiero.
Qué queda en el aire
- La tensión entre la internacionalización de LaLiga y los intereses de los grandes clubes sigue abierta.
- El debate sobre regulación, control institucional y la posibilidad de celebrar partidos oficiales fuera de España no ha concluido.
- Mientras tanto, clubes y organizadores seguirán buscando fórmulas para combinar proyección global y seguridad económica.