De pibe gunner a rival declarado: las imágenes que lo dijeron todo

En las redes sociales circulan desde hace años dos fotografías que resumen una paradoja: Harry Kane, vestido de Arsenal y celebrando el título de la Premier League de 2004, con la cabeza pintada de rojo, y otra en la que posa con un equipo de menores de 8 años con la camiseta completa de los Gunners. Sin embargo, ese idilio infantil con el club no se tradujo en una carrera allí.

La decisión en Hale End

Según relatos recogidos por The Mirror entre los entrenadores que trabajaban en la Academia Hale End en 2004, la excusa no fue una sola. En ese momento, Kane tenía lo que describieron como «grasa de cachorro», no destacaba por su capacidad atlética ni por la velocidad de carrera, y competía con Benik Afobe, considerado entonces una opción más prometedora y con mejores condiciones físicas.

  • Afobe, pese a las expectativas, no llegó a asentarse en el primer equipo del Arsenal y pasó por múltiples cesiones antes de fichar definitivamente por los Wolves.
  • Mientras tanto, el joven Kane siguió otro camino que lo llevaría a forjar su carrera fuera de Hale End.

De los Spurs y las cesiones al protagonismo

A los 11 años Kane recaló en Tottenham Hotspur. Su progresión no fue inmediata: acumuló varias cesiones para buscar minutos y experiencia —Leyton Orient, Norwich City, Leicester City y Millwall— antes de consolidarse como delantero de referencia.

Una deuda personal y estadística contra el Arsenal

Kane nunca ocultó su deseo de demostrar que el Arsenal se había equivocado al dejarlo ir. Esa motivación quedó plasmada en números: 15 goles en 21 encuentros frente a los Gunners. Se destacó en derbis del norte de Londres y también tuvo un papel clave en la eliminatoria de cuartos de final de la Liga de Campeones 2023-24, en la que el Bayern Múnich eliminó al Arsenal.

La confesión de 2024

En septiembre de 2024, Kane recordó públicamente el rechazo infantil como estímulo: «Sí, probablemente a lo largo de toda mi carrera, en realidad. Empezando desde que tenía ocho años y fui liberado del Arsenal. Eso podría haber generado un poco de deseo de demostrarles cuando tenía esa edad». La frase dejó en claro que, más allá del presente, hay una cuenta pendiente emocional que alimenta su rendimiento frente al Arsenal.

Kane y la preocupación por los balones parados

Antes del cruce de Champions League ante el equipo de Mikel Arteta, Kane advirtió sobre la amenaza que representan las acciones a balón parado del Arsenal y subrayó la necesidad de atención defensiva. Dirigiéndose a la prensa, dijo:

«Por supuesto que sigo la Premier League. Arsenal lo ha hecho bien hasta ahora en ese departamento. Nos hemos preparado para el Arsenal como de costumbre. Lo mejor será no darles ningún balón parado, controlar el juego, y necesitamos defender mejor de lo que lo hemos hecho recientemente cuando concedemos balones parados.»

Conclusión

La historia de Kane con el Arsenal combina imágenes de infancia, decisiones de cantera, trayectorias divergentes y una revancha deportiva que suma goles, clásicos y declaraciones. Más allá del nostalgia, hoy su mirada está puesta en neutralizar las armas del rival y en que los hechos en la cancha respalden su legado.