Una noche para el olvido en Anfield
El regreso de Giorgi Mamardashvili tras la lesión de Alisson no cambió el guion: la defensa quedó expuesta una y otra vez y el PSV terminó imponiéndose con cuatro goles. No obstante, el arquero georgiano no puede cargar con la responsabilidad de los tantos rivales. La actuación colectiva fue deficiente, con errores puntuales que decidieron el partido y una sensación persistente de desajuste defensivo.
Calificaciones y análisis
- Giorgi Mamardashvili (4/10): Volvió a la titularidad por la baja de Alisson y sufrió constantemente por lo que ocurrió delante suyo. Pese a la mala imagen general, no tuvo culpa en ninguno de los cuatro goles del PSV.
- Curtis Jones (4/10): Le pidieron que cubriera como lateral y estuvo ocupado durante toda la noche por el persistente ataque rival. Fue de los pocos en la línea defensiva que evitó un error garrafal.
- Ibrahima Konaté (3/10): Genera dudas sobre su continuidad en el once. Tuvo una buena opción de cabezazo en un córner en la segunda mitad, pero un fallo básico —permitir que el balón pasara bajo sus pies— facilitó el tercer gol del PSV. Fue sustituido a diez minutos del final.
- Virgil van Dijk (3/10): Jornada fatídica para el capitán: concedió un penal innecesario y minutos después recibió una amarilla por una entrada imprudente. Pese a que vio un cabezazo estrellarse en el travesaño al minuto 30, su noche fue pobre y determinante.
- Milos Kerkez (4/10): Durante la primera hora fue de lo mejor, controlando los envíos por la banda izquierda y ocupándose con trabajo de los delanteros rivales. Se marchará decepcionado por no haber contenido la carrera de Til en el segundo gol del PSV.
- Alexis Mac Allister (5/10): Se movió demasiado en su propia mitad y mostró frustración cuando logró avanzar al área contraria, después de que se desestimaran un par de apelaciones de penal. Un rendimiento discreto.
- Ryan Gravenberch (5/10): Incansable en el desplazamiento, pero escaso bagaje ofensivo. Otro jugador que deberá reflexionar tras una actuación plana.
- Dominik Szoboszlai (6/10): Slot lo retrasó al centro y la modificación dio resultado: su arrancada inició la jugada que terminó en el gol del empate. Corrió y presionó sin descanso, fue clave en los momentos decisivos y resultó peligroso cerca del área rival.
- Mohamed Salah (4/10): Lejos de su mejor versión, fue una sombra del jugador determinante que se espera. Sobrevivió con pocas intervenciones y sin conseguir desequilibrar.
- Hugo Ekitike (5/10): Le dieron la oportunidad frente a Isak y generó sensación de amenaza constante, pero no concretó ninguna de las ocasiones que tuvo. Sus gestos hacia el banco anunciaron problemas: señaló lesión y se retiró cojeando a los 60 minutos.
- Cody Gakpo (5/10): Frente a su antiguo club mostró energía y creó varias oportunidades para los Reds, aunque terminó frustrado por no convertir o decidir el partido.
- Alexander Isak (4/10): Slot explicó que lo había reservado por la acumulación de minutos, pero lo ingresó tras la lesión de Ekitike. Participó poco y tuvo escaso contacto con el juego en el tiempo que estuvo.
- Federico Chiesa (4/10): Reemplazó a Konaté con unos 15 minutos por jugar y apenas dejó huella; escasas intervenciones y sin capacidad de generar peligro con los pocos toques que tuvo.
Valoración del entrenador
Arne Slot (3/10): La Champions había sido un refugio entre las dificultades de la Premier, pero las mismas carencias se evidenciaron en Anfield. No encontró respuestas durante el partido y el problema principal es la defensa: un desastre que exige soluciones urgentes.
Suplentes y notas finales
Las sustituciones no alteraron el rumbo del encuentro: la lesión de Ekitike y los cambios defensivos no alcanzaron para recomponer la endeble estructura defensiva. En general, una actuación colectiva por debajo de lo esperado y varios puntos críticos por resolver antes de la próxima cita internacional.