Verano convulsionado: del Newcastle a Anfield

La salida de Alexander Isak de Newcastle rumbo a Liverpool fue, sin dudas, la historia del mercado estival: un traspaso largo, polémico y con opiniones encontradas. El propio delantero intentó cerrar el capítulo con mesura: «No puedo controlar todo lo que se dice o escribe», afirmó tras concretarse la operación. «Ha sido educativo, y estoy feliz con el resultado final. Estoy orgulloso de ser jugador de Liverpool. No quiero entrar en detalles o hablar demasiado sobre esa situación. Es un capítulo cerrado, pero nunca he tenido ningún problema.»

Problemas físicos y una pretemporada perdida

La calma del discurso contraste con la realidad: Isak llegó a Merseyside con evidentes problemas de ritmo. Por su negativa a participar en la pretemporada del Newcastle y su ausencia en los primeros tres partidos de la Premier League, el sueco aterrizó en Anfield sin haber disputado un solo minuto competitivo en más de tres meses. La intención era que estuviera disponible en el primer choque de la Premier tras el parón internacional, contra Burnley, pero su entrada en el grupo se demoró.

La explicación de Slot

Arne Slot dejó claro el plan: «Lo trajimos del Newcastle en un estado en el que se podría decir que su pretemporada solo iba a comenzar entonces», explicó tras la victoria por 1-0 del 14 de septiembre. «Necesita adecuadas sesiones de entrenamiento antes de tener una cierta base, y mucho menos para jugar dos veces en tres días… tratamos de preparar a los jugadores para el inicio de la temporada una vez a la semana, y luego intentamos hacer más y más antes de entrar en el ritmo de dos juegos por semana.»

Debut europeo y primeras impresiones

A pesar de la cautela, Slot lo alineó de titular en el estreno de Champions contra Atlético de Madrid cuatro días después, y la actuación colmó expectativas: «No me sorprendió su calidad, ya que sabemos todo sobre eso, pero me sorprendió positivamente lo en forma que estaba Alexander durante sus 60 minutos», dijo Slot a TNT Sports. El entrenador subrayó que, aunque solo había entrenado durante dos semanas, Isak trae consigo experiencia a alto nivel y una mentalidad necesaria para competir en Premier y copas.

Rendimiento y crítica pública

Sin embargo, la reacción colectiva no tardó en endurecerse. El único gol oficial de Isak con la camiseta roja hasta ahora llegó en la Carabao Cup ante Southampton el 23 de septiembre; desde entonces, la cosecha goleadora no apareció. Entre el 27 de septiembre y el 19 de octubre comenzó tres partidos consecutivos de la Premier League, y el equipo no consiguió buenos resultados en ese tramo.

El 4 de octubre, en Stamford Bridge, pudo haber servido una asistencia en la derrota 2-1 ante Chelsea, aunque el intento terminó siendo un control dirigido a sí mismo más que un pase claro a Cody Gakpo. En contraste, su compañero Hugo Ekitike, fichado en el mismo mercado estival, arrancó con mejor ritmo y encuentró gol rápido, lo que potenció la comparación entre ambos.

Voces críticas

  • Don Hutchison, exdelantero de Liverpool, no fue amable: «Fue poco profesional y ingenuo no solo dejar de trabajar, sino sacrificar su condición física… Creo que ha sido mal gestionado y asesorado por su agente durante todo el verano, pero al final todo se reduce al jugador.»
  • La narrativa pública y mediática se volvió en contra del sueco: se le reprochó no respetar sus obligaciones contractuales con Newcastle y llegar a Liverpool sin el nivel físico esperado.

Lesión y el complicado equilibrio de Slot

El 22 de octubre, en el partido de Champions frente al Eintracht Frankfurt, Isak abandonó el campo por problemas en la ingle. La lesión fue rápidamente vinculada a su falta de tono físico y a la delicada tarea del cuerpo técnico de acelerar su puesta a punto dentro de una temporada ya en marcha.

Slot reconoció la dificultad: «Cuando llegó, apenas había entrenado, así que lo haces avanzar paso a paso y luego sientes que debe haber un momento en el que pueda jugar dos veces a la semana… muchas personas me dijeron que querían que lo pusiera más, pero teníamos que encontrar el equilibrio y, desafortunadamente, ese equilibrio no funcionó para nosotros hoy.»

Selección, parón y vuelta a empezar

Tras figurar en el banco ante Manchester City el 9 de noviembre, Isak viajó con Suecia y solo participó los últimos 30 minutos de la derrota 4-1 en Suiza. El nuevo seleccionador Graham Potter optó por no alinearlo en el siguiente partido frente a Eslovenia para evitar una tarjeta que le impidiera jugar la semifinal de repesca contra Ucrania en marzo. Ese giro dejó al delantero otra vez en punto de partida: necesita partidos y, sobre todo, goles.

En el contexto del Liverpool, hoy es difícil defender su titularidad por delante de Ekitike, cuya forma facilita a Slot gestionar la vuelta al juego de Isak. El entrenador neerlandés, no obstante, insiste en que el club requiere dos delanteros de primer nivel para soportar la carga de defender el título de la Premier y competir en la Champions: «Alex debe jugar tantos partidos como pueda lo antes posible».

Presión creciente y un mensaje de Isak

La presión sobre Slot y sobre el propio Isak solo irá en aumento: el club no puede permitirse tener al fichaje de £125 millones sentado en el banco o en la grada durante un periodo prolongado. Aun así, hay señales alentadoras. Isak declaró que se siente listo para «jugar correctamente» tras sumar 28 minutos en Ginebra el pasado sábado y mantiene una actitud positiva: «La preparación no ha sido óptima», confesó a Sportbladet, «pero, cuando estoy en el campo, no me doy excusas.»

Conclusión

La paciencia se está agotando. Entre la polémica del verano, la falta de rodaje, las críticas públicas y la lesión, Isak necesita ya una serie prolongada de partidos de alto nivel para justificar la inversión y devolver la confianza. Para Liverpool y para el delantero sueco, el tiempo de excusas terminó: es hora de respuestas concretas en la cancha.