Una noche de luces: José María Giménez, la mano que sostuvo al Atleti
En el fondo sur del Metropolitano se desplegó el mosaico con el lema «La luz que nos guía» y, como no podía ser de otra manera, el escudo rojiblanco brilló en el centro. Esa misma luz terminó viniendo desde la cabeza de uno de los que lleva más de una década defendiendo estos colores: José María Giménez. El uruguayo, siempre tempranero en los cruces, se elevó en un córner cuando Letexier ya se preparaba para pitar el final y conectó con la red para forzar lo que acabaría siendo un triunfo colchonero en la tanda de penales.
El carácter del capitán
Simeone lo dijo sin rodeos: cuando Giménez está bien es el mejor central del equipo. Ante el Inter no fue sólo seguridad en las labores defensivas —donde volvió a destacar—; el zaguero actuó como capitán, como líder, y terminó asumiendo el papel de goleador decisivo. Fue el epílogo perfecto para un partido de altos quilates en el Metropolitano.
Un partido con rachas y una grada tibia
El choque tuvo fases intensas pero, sorprendentemente, no contó con el ruido habitual de las grandes noches. Tal vez el frío, tal vez otra razón, la hinchada no se sintió tan conectada durante gran parte del encuentro. Sólo cuando los cambios obligaron al Atlético a dar un paso adelante se encendió algo en la tribuna; y al final, tras el pitido definitivo, la celebración fue total.
Momentos claves
- Dimarco adelantó al Inter y, por momentos, parecía que la visita tenía la eliminatoria encarrilada.
- La respuesta rojiblanca llegó con un tanto que igualó el partido y equilibró la serie.
- En el descuento, Giménez cabeceó en un córner para devolver la esperanza y llevar la definición a los penales.
- En la tanda, el Atlético se impuso y selló el pase.
El duelo de los móviles y la luz que guió
La curiosa batalla de las linternas volvió a repetirse: los seguidores del Inter, aunque en menor número que en los octavos de la temporada 23/24, encendieron sus teléfonos tras el gol de Dimarco. La afición colchonera respondió con intensidad: con el tanto del empate, con la igualada de la eliminatoria y finalmente con el festejo tras los penales. Al final, como rezaba el mosaico, la luz guió al Atlético.