El golpe veraniego que cambió el ataque rojiblanco
La llegada de Julián Álvarez al Atlético de Madrid en el verano de 2024 se leyó desde el primer día como una de las operaciones más destacadas del mercado: el club desembolsó €95 millones (£82m/$104m) para apartarlo del Manchester City. El delantero argentino, ex River Plate, respondió con números que justificaron la inversión: 38 goles y 12 asistencias en 72 partidos con el Atleti, incluyendo 29 tantos en su temporada de debut, lo que lo convirtió de inmediato en el eje ofensivo del equipo dirigido por Diego Simeone.
Impacto inmediato
- Traspaso: €95 millones (£82m/$104m) desde el Manchester City.
- Producción: 38 goles y 12 asistencias en 72 partidos.
- Temporada de estreno: 29 goles.
- Origen: ex delantero de River Plate.
Griezmann: la influencia detrás de la operación
Lo que no trascendió públicamente hasta ahora fue el peso que tuvo Antoine Griezmann en la concreción del fichaje. El francés, en su décima temporada con Los Rojiblancos y ya considerado una figura legendaria del club, confesó que contactó personalmente a Álvarez durante las negociaciones.
Griezmann explicó su intervención con crudeza periodística y naturalidad: «Sabía que el club estaba haciendo todo lo posible para traerlo. Así que decidí escribirle un mensaje de diez o veinte frases para convencerlo. Un mensaje en el que le conté todas las grandes cosas sobre el Atleti, Cholo y sus compañeros de equipo… Y al final, después de mucha insistencia, vino a unirse a nosotros. Creo que le escribí unas cuatro veces antes de que finalmente tomara una decisión.»
Vestuario, competencia y química
La presencia de Álvarez no solo reforzó el ataque sobre el papel, sino que alimentó la competencia interna y la química del plantel. Para Griezmann, cuantos más jugadores de nivel haya, mayores son las posibilidades colectivas. «Al final, cuantas más estrellas tengamos, por así decirlo, mejor para el club y más oportunidades tenemos de ganar. Al final, tratamos de tener una buena relación dentro y fuera del campo, y creo que eso se nota cuando jugamos», señaló.
Adaptación y profesionalismo: el nuevo rol de Griezmann
Con Álvarez consolidado como punto focal, Griezmann transitó hacia un papel más flexible dentro del esquema de Simeone. A pesar de no ser siempre titular indiscutido, su influencia en el vestuario y su liderazgo permanecen intactos. Sobre la necesidad de competir por minutos y mantener profesionalismo, el francés fue claro: «En última instancia, siempre quieres jugar. Pero entiendo que tengo que ser profesional, que debo ser un ejemplo para todos mis compañeros de equipo y luego mostrarle al entrenador que todavía estoy listo para jugar, que tengo todo lo que necesito para jugar y ganar un lugar en el once titular. Quiero jugar. Estoy muy feliz aquí en Madrid, jugando para el Atleti, y creo que eso se está mostrando esta temporada.»
Además, su renovación hasta 2027 —extendiendo el contrato que ya llegaba hasta 2026— reafirma su intención de seguir contribuyendo al proyecto rojiblanco y de acompañar la transición generacional del club.
Rumores de la MLS y la decisión de quedarse
A pesar del compromiso renovado, Griezmann no escondió su interés de largo plazo por la MLS. En los últimos doce meses las especulaciones se mantuvieron; el LAFC fue uno de los clubes que mostró más insistencia el pasado verano. Finalmente, el Atlético decidió retenerlo al menos para la temporada 2025-26.
«No. Al final, siempre fui tema de conversación», admitió Griezmann. «Desde el primer día que llegué hasta el último día que me vaya, lo seré. Pero, como dije, estoy muy feliz aquí. Todo el mundo sabe que la MLS es mi sueño, mi objetivo, pero todavía tengo contrato, quiero seguir renovando aquí y continuar siendo un jugador importante.»
El atacante de 34 años, campeón del mundo en 2018, suma así otra temporada para seguir dejando huella en Madrid mientras mantiene la puerta abierta a un posible destino estadounidense en el futuro.
Una narrativa compartida: mentor y competidor
La historia reciente del Atlético se escribe con dos protagonistas que se complementan: Julián Álvarez emergiendo como la referencia ofensiva y Antoine Griezmann ejerciendo de guía, competidor y símbolo de continuidad. El club confía en que esa dualidad —la ambición del joven goleador y la experiencia del veterano— sea la fórmula para pelear en España y Europa, mientras la sombra de la MLS sigue siendo un factor a considerar en futuros capítulos.